Freddy
Tarcaya Gallardo
Comité
Impulsor de Reconocimiento y Reconstitución de la Nación Chichas.
La
concretización de la Nación Chichas en el contexto del Estado Plurinacional
trajo consigo un remezón que movió esquemas neocoloniales, pues la concepción
reduccionista homogeneizadora, entiende por naciones a los idiomas quechua y
aymara, forzando en dichos idiomas cualidades de nación incompatibles con la
Constitución del Estado Plurinacional y la Ley Marco de Autonomías y
Descentralización. La Nación Chichas es una realidad antes que una abstracción
política indigenista o indianista.
Esta
concretización en la coyuntura actual encuentra a la Nación Chichas en un
proceso de reconstitución, que se apoya en la piedra angular de su territorio,
cultura, cosmovisión, historia e institucionalidad expresada en cinco
municipios: Atocha, Cotagaita, Tupiza, Villazón y Vitichi y las Tierras
Comunitarias de Origen. Sin embargo, el elemento esencial es la población y la
decisión de pertenencia a la nación. Precisamente la prueba de fuego donde se
templó la identidad chicheña fue el censo del 2012 cuyos resultados arrojaron a
59.276 chicheñ@s, mayoritariamente concentrados en los municipios Tupiza,
Villazón, Cotagaita, Atocha y Vitichi.
El
objetivo de la autonomía como necesidad económica, política e histórica de este
proceso de reconstitución generó condiciones inmejorables para el autogobierno,
pues este es el destino de la Nación Chichas en el marco de la Constitución y
la Ley, por tanto, el Estado Plurinacional es intrínseco a esta reivindicación,
sin la plurinacionalidad intra e intercultural la materialización de este
anhelo histórico no tiene sustento alguno. Sin embargo, la majadería
“culturalista”, se empeña en desmentir nuestra existencia, argumentando que no somos
nación, sino, una “manifestación cultural”. El próximo paso de plomo a dar es la
Certificación de Condición de Territorio Ancestral a los cinco municipios de la
Nación Chichas y de este modo optar por la Autonomía Indígena como nación.
Será la mejor respuesta a los sectores políticos conservadores.